martes, 13 de noviembre de 2007

Los amo y siempre están en mis oraciones.

Esto de la Internet es maravilloso,con la ayuda del espíritu podemos estar siempre juntos, en este instante cierro mis ojos por un momento, y los puedo ver a los cuatro en el fondo de mi mente, me sonrió y sigo escribiendo. Han pasado los años amada hija y creciste, hoy eres mamá y esposa, tienes tus hijos, pero para mi sigues siendo la misma, nuevamente cerré mis ojos y me acorde cuando tu eras una infante, te llevaba a un parbulario que estaba en unos edificios detrás de la población 11 de septiembre , no me acuerdo exactamente, pero si era un delantal rosado de cuadrille el que usabas. De cualquier modo los detalles no son los que cuentan, lo que cuenta es que ahora yo un viejo, soy feliz cuando me acuerdo de ti hija mía. Los amo y siempre los tengo en mis oraciones, cuando me voy a la cama mentalmente les digo buenas noches, les doy una mirada porque los tengo a mi costado.

Hoy me puse a buscar algo de Marcela Paz, la escritora, ella fue la inspiración de tu nombre, y recuerdo que no fue al azar, venía contigo una sensibilidad especial. Usted nació bajo Convenios Sagrados y eso a veces me hace pensar....Me hace pensar que hay todavía una vida por delante para volver los convenios al terreno que corresponde, de hecho tienen dos hijos que nos alumbran nuestros caminos. Sabe D--s que le amamos, y también nos conoce en nuestras debilidades, pero todo en sí vale la pena, porque siempre hemos sentido Su amor. Que el Señor os bendiga, los amo.


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